ME GUSTARÍA ENTENDERLOS… PERO NO LO HE CONSEGUIDO

INTERSINDICAL y BEN MAGEC

Ante el artículo aparecido en el periódico El Time, el pasado día 22 de mayo, he intentado hacer un ejercicio de reflexión y de prudencia, procurando entender qué mueve a estas personas a adoptar esa postura, y sigo sin entenderlos…

A título personal, pero estoy seguro que la inmensa mayoría de los habitantes de La Palma piensan como yo, tampoco se explican lo que persiguen con esas posturas.  Y espero que la situación se aclare y, si por las decisiones que no podemos tomar aquí, finalmente el TMT pudiera venir a La Palma, nadie se oponga por oponerse, y si hay algún motivo objetivo, relevante, que lo exponga para buscar la solución, pero que no impida la instalación del TMT.

No es necesario explicar los aspectos positivos que comporta la instalación del TMT en nuestra Isla. Está muy claro en el informe elaborado por la ULL a finales del año pasado, tanto en términos de inversión como de VAB y de Empleo.

Parece que, salvo que alguien tenga el temor de que se fuera a hundir la Isla, no habría motivos para posicionarse en contra de esa inversión.

Por lo visto, organizaciones ecologistas y también un sindicato, han prometido presentar recursos de oposición.

Y eso es lo que me gustaría entender, qué temores tienen, qué alegan…, para intentar que se encuentren medidas correctoras para evitar los daños, y se pueda continuar con la disposición favorable a la instalación.

Creo que las organizaciones ecologistas aportan la búsqueda de la conservación de valores, y eso hay que aplaudirlo.  Y que los sindicatos buscan la defensa de los intereses de sus afiliados, que también es correcto.

Pero no he logrado entender qué valores medioambientales se ponen en riesgo con la instalación del TMT, ni tampoco que derechos laborales para un colectivo de trabajadores, la mayoría vinculados a la formación, que justifiquen una oposición al desarrollo de la CIENCIA y del CONOCIMIENTO, con posibilidad de incremento de la afición por la investigación para los jóvenes de La Palma y de Canarias, que puede llevarnos a que muchos de ellos tomen esa senda del conocimiento, y que comportaría desde el punto de vista económico un importante salto para los ingresos de los palmeros. Además, es inconcebible que un Sindicato se oponga a la creación de puestos de trabajo bien remunerados y de alta cualificación.

Me gustaría que, actuando de buena fe, que considero que es lo mejor que podemos hacer todos, digan qué riesgos están viendo, para que quien pueda, encuentre las soluciones para que La Palma no salga perjudicada, y nos quedemos con los aspectos positivos que dicha inversión comporta.

No vivimos los mejores tiempos.  El Covid-19 nos ha atacado, como a todos, y aunque vamos saliendo razonablemente bien de los aspectos sanitarios, nuestra economía está muy necesitada. Ya lo estaba antes, y ahora más… Tendríamos que ponernos todos en positivo, y hacer lo necesario para que se pueda desarrollar un proyecto como éste, que aportaría a la isla de La Palma una potente inversión, desarrollo científico, creación de puestos de trabajo, impulso a las empresas palmeras y también, oportunidad de estudios para nuestra juventud.

Por lo que he podido ver, ni Intersindical Canaria ni Ben Magec proponen una alternativa económica veraz y creíble para el desarrollo de la isla. Lo único que dicen es que esa inversión se debería destinar al estudio de una vacuna contra la Covid19. Es una opinión, como todas, respetable, pero seguro que no sería una inversión en La Palma.

Y no parece que sean conscientes de otra realidad: Ni el Cabildo de La Palma ni el Gobierno de Canarias tendrán que poner un solo céntimo para ello. La inversión proviene de los países que conforman el TMT. Es más, repercutirá en impuestos a favor de la isla.

Sigo sin ser capaz de entender qué motivos hay, que riesgos…, para renunciar a una inversión de cerca de 2.400 millones de Euros que costará su construcción y de los 40 millones anuales que aportará durante los 75 años de su operatividad.

Producirá una recaudación fiscal de 13 M€ al año.  Y potenciará una demanda de servicios en 20 sectores diferentes.

El proyecto del Telescopio supondrá la creación, durante su etapa de construcción y equipamiento, de cerca de 900 puestos de trabajo para las diversas capas laborales de la isla. Además, de que propiciarían becas de estudios para los jóvenes.

Favorecería la creación de nuevas empresas y la potenciación de muchas de las actuales. Daría lugar, incluso, a la unión en zona ZEC de varias de ellas para proporcionar material e instrumentos de construcción para el Telescopio.

Es absolutamente falso que destruya ningún resto arqueológico. En caso de que allí se encontrara alguno, bajo la supervisión del Jefe del Servicio arqueológico del Cabildo, serían entregados al mismo, para su exposición en el Museo que se considere pertinente.

Quiero pensar, siempre dentro de la buena fe, que lo que deben hacer tanto Ben Magec como Intersindical Canaria, es advertir de aquellos riesgos reales que consideren que se pueden presentar, con la finalidad de incorporar a los proyectos, las medidas correctoras que los eviten.  Pero nunca entorpecer y retrasar el futuro de nuestra sociedad, en la que viven y se da por hecho que quieren seguir viviendo.

Ojalá que reflexionen y, bien desistan de su actitud de oponerse por oponerse, o bien aclaren qué valores ven en riesgo, de forma que los puedan analizar los que tengan suficiente conocimiento para hacerlo, y aportar soluciones que eviten los supuestos efectos negativos, pero permitan desarrollar el proyecto, que tantas ventajas aportará, si logramos que venga, para La Palma y para los palmeros.

Y dicen que de sabios es rectificar…  Háganlo, sobre todo después de la información que ha circulado hoy, en relación con la sentencia firme sobre otro conflicto que iniciaron con otra instalación en El Roque.  No hagan que se repita.

Tomás Barreto Lorenzo